El pase reglamentado (conocido habitualmente como “pase automático”) es uno de los dos caminos para ingresar al nivel superior de la UNAM, refiere a los alumnos egresados de la Escuela Nacional Preparatoria y del Colegio de Ciencias y Humanidades que tengan un promedio mínimo de 7.0 y hayan concluido sus estudios en un máximo de cuatro años para poder ingresar a la carrera universitaria de su preferencia.
Según las estadísticas de la universidad, para la convocatoria 2008 – 2009, fueron aceptados e inscritos satisfactoriamente 35 685 personas, de las cuales 68.54% ingresaron por pase automático.
No hay cifras (al menos no de fácil acceso o ubicación) del destino de los alumnos respecto a las carreras que eligen, pero existe una aproximación interesante en un fenómeno que se lleva a cabo en la Facultad de Economía. Históricamente (desde el pase reglamentado) la mayoría de las personas que ingresan no desean ser economistas, muchos albergan la esperanza de cambiar de carrera y mientras “aprovechar” las clases de la Facultad, es de conocimiento público que una gran cantidad de las personas que urden este tipo de planes gozaron de las bondades del pase automático. Esto se sustenta con un poco de lógica: Las personas que ingresan por examen de admisión eligen la carrera de su preferencia y si cumplen con el mínimo de aciertos y el promedio requerido son aceptados; las personas que ingresan por pase reglamentado observan su promedio escolar y eligen la carrera para la cual les es suficiente (aunque no sea la carrera que querían).
El criterio académico debe estar más allá de la conveniencia del pase reglamentado para nivelar la balanza social o del argumento sobre el accidente histórico que es el pase. En el primer caso, la Universidad tiene otros métodos (mucho más efectivos) para disminuir la diferencia de clases sin sacrificar la calidad académica; en el segundo caso, no podemos olvidar la dupla pluralidad-eficiencia de la que hace alarde la UNAM.
El pase reglamentado, siempre en la porfía de la mística universitaria, debería ser revisado para el caso de la traqueteada Facultad de Economía o corremos el riesgo (en la mejor de las circunstancias) de seguir titulando sociólogos, filósofos, administradores, contadores, internacionalistas o comunicólogos frustrados; la peor parte: Abandonar lugares obtenidos en la Facultad, ya sea por deserción o por el anhelado cambio de carrera, que podrían ser usados por aspirantes a economistas que tengan un poco más de vocación.
Según las estadísticas de la universidad, para la convocatoria 2008 – 2009, fueron aceptados e inscritos satisfactoriamente 35 685 personas, de las cuales 68.54% ingresaron por pase automático.
No hay cifras (al menos no de fácil acceso o ubicación) del destino de los alumnos respecto a las carreras que eligen, pero existe una aproximación interesante en un fenómeno que se lleva a cabo en la Facultad de Economía. Históricamente (desde el pase reglamentado) la mayoría de las personas que ingresan no desean ser economistas, muchos albergan la esperanza de cambiar de carrera y mientras “aprovechar” las clases de la Facultad, es de conocimiento público que una gran cantidad de las personas que urden este tipo de planes gozaron de las bondades del pase automático. Esto se sustenta con un poco de lógica: Las personas que ingresan por examen de admisión eligen la carrera de su preferencia y si cumplen con el mínimo de aciertos y el promedio requerido son aceptados; las personas que ingresan por pase reglamentado observan su promedio escolar y eligen la carrera para la cual les es suficiente (aunque no sea la carrera que querían).
El criterio académico debe estar más allá de la conveniencia del pase reglamentado para nivelar la balanza social o del argumento sobre el accidente histórico que es el pase. En el primer caso, la Universidad tiene otros métodos (mucho más efectivos) para disminuir la diferencia de clases sin sacrificar la calidad académica; en el segundo caso, no podemos olvidar la dupla pluralidad-eficiencia de la que hace alarde la UNAM.
El pase reglamentado, siempre en la porfía de la mística universitaria, debería ser revisado para el caso de la traqueteada Facultad de Economía o corremos el riesgo (en la mejor de las circunstancias) de seguir titulando sociólogos, filósofos, administradores, contadores, internacionalistas o comunicólogos frustrados; la peor parte: Abandonar lugares obtenidos en la Facultad, ya sea por deserción o por el anhelado cambio de carrera, que podrían ser usados por aspirantes a economistas que tengan un poco más de vocación.
. : . :.
Un poco más . . .
La UNAM, entre sus autores se cuenta el investigador Pablo Latapí Sarre (nada que ver con el del noticiero x_x)
. . . y a lo mejor nos comprendemos luego.
6 comentarios:
En la conocida y cuestionada columna de El Astillero, se ha calificado al ITAM como la "institución surtidora de cuadros neoliberales"; ¿Acaso la Facultad de Economía de la UNAM se está volviendo surtidora de ovejas perdidas y frustradas? _-_
No era ese el espíritu de mi comentario, es verdad que muchos de los alumnos se encuentran frustrados o disminuidos en sus capacidades como economistas por los motivos antes expuestos, pero hay un sector importante que si tiene la vocación o desea obtenerla, también se encuentran personas que adquieren la vocación en el transcurso de la carrera.
Pero insisto, si se desea incrementar la efectividad de la Facultad se debe revisar el pase reglamentado.
que lindome ayudas amis tareas sabs mucho eres sencillo e inteligente tu tienez a culpa por dejar tu linck al aire sabiendo que yo lo miro y puedo ponerte cosas cursis que no tienen nada k ver con economia vez en fin
psd :note averguenzez de tu amigaa pubeertaaa bien keme kieres aioz
besos
besos
adiozzzz
besos
Es muy atinado tu post Ernesto, tal vez el 85% de los estudiantes de nuestra facultad no tiene la vocación de economistas, tal vez, ese porcentaje todavía no sabe que es un economista y que hace, pero bueno.Sinceramente creo que tu eres uno de los pocos que yo conozco(si no el único)que realmente tiene una vocación hacia la carrera de economista, por eso siguete superando para que pongas en alto el nombre de nuestra escuela.
Hola que tal, deberias de hacer un comentario referente a la carrera que se supone, se impartira entre fac economia y la fac de ingenieria, yo estoy interesado en cursarla, aunque estoy en la carrera de ing industrial, pero tengo la tentativa si no existe economia y negocios al menos economia ... como segunda carrera
saludos
saludos
Jorge, no hay mucho que decir acerca de la carrera de economía y negocios, el proyecto se ha quedado estancado y no se ve para cuando se impulse de nuevo.
Saludos
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